Ser emprendedor y encontrarse de repente con una empresa que crece es lo que todo emprendedor querría pero un día te das cuenta de que ya no se trata sólo de hacer lo que te gusta, que normalmente es el tema central del negocio, sino que ha crecido el número de personas que integran la empresa y que te tienes que ocupar también de ellos.
Así empiezan a convivir personas con diferentes estilos de comportamiento, de formas de procesar la información, de sistema de representación, de cultura, de formación…y es frecuente oír al emprendedor decir “no entiendo por qué no lo ha hecho si yo se lo he dicho”.
Y es que pensamos que los demás son como nosotros y la verdad es que no es así.
Seguro que conoces a personas muy rápidas, que reaccionan velozmente y que buscan soluciones constantes y formas de resolver y además lo ponen en práctica. Suena bien, ¿verdad? ¿querrías a uno de ellos en tu empresa? Son las personas denominadas DRIVER.
Otro tipo de personas son aquellas que buscan antes de reaccionar todos los elementos y detalles necesarios y valoran todas las opciones. Son muy fiables cuando han decidido ya que han realizado una valoración analística exhaustiva. ¿Querrías uno de ellos en tu empresa? Son los denominados ANALÍTICOS.
Probablemente querrás ambos tipos de personas. Tanto el driver como el analítico están enfocados a conseguir resultados, el driver de forma rápida, perdiéndose muchos detalles en ocasiones y el analítico más pausado analizando tanto que quizá nunca llegue a decidir pero hará los mejores análisis. Sin embargo debes saber que hay más tipos de comportamiento. Ninguno de estos está enfocado a las personas sino a conseguir objetivos.
El expresivo es rápido de reacciones, líder, le gusta la fiesta, las personas, las celebraciones, crea espíritu de equipo y monta las cenas de empresa. Probablemente también querrás una persona así en tu equipo aunque los EXPRESIVOS no están enfocados tanto en conseguir objetivos sino en las personas.
Un último grupo dentro de esta clasificación macro son aquellas personas que buscan que todos estén bien, no quieren conflictos, ayudan a la gente y están a tu lado incondicionalmente. Son los denominados RELACIONALES. Muy necesarios para el bienestar del equipo, enfocado más en las personas que en conseguir objetivos.
Hasta aquí probablemente pensarás que quieres tener a uno de cada en tu equipo.
Sin embargo así empieza el lío. El driver es muy rápido al expresar sus juicios aunque luego se le pasa pero al analítico si le sienta algo mal se lo guardará para siempre. El expresivo y el relacional no entienden por qué le driver y el analítico son tan fríos y siempre están concentrados en lo que consideran producción, pero no son tan productivos porque están aislados. A su vez estos piensan que los expresivos y los relacionales están perdiendo el tiempo con tanto contacto social.
El driver se enfadará y soltará todo lo que le pasa por la cabeza sin tener en cuenta quién tiene delante, sin embargo, en 10 minutos volverá, para sorpresa de todos, como si nada hubiera pasado. El analítico cuando ha sido herido se lo quedará para siempre y lo recordará y se alejará del driver. En medio del lío está el expresivo que si le ha afectado lo que ha pasado montará un drama para tener a las personas alrededor y, por último, en silencio el relacional lo pasará muy mal porque no soporta el conflicto e intentará apaciguar los ánimos hasta el día que ya no puede más y estalla de forma desproporcionada ante la sorpresa de los demás.
Sólo para entender lo complejo de la interacción entre seres humanos te dejo una macro clasificación más. Son los que en Programación Neurlingüistica se denominamos sistemas de representación. Tenemos preferencia por uno de estos sistemas, así hay personas con una tendencia más visual, ven la vida en imágenes, se relacionan viendo cosas, colores, hablan velozmente y no necesitan la palabra exacta, prefieren una explicación con fotos o diseños. Otros son más auditivos, hablan y escuchan, la vida es secuencial y ordenada como el lenguaje, valoran una buena conversación. Por último, algunos tienen preferencia cinestésica, viven experiencias, sienten, hablan muy pausado porque están sintiendo cada una de las palabras y se conectan a través de las emociones.
Si al los 4 estilos de comportamiento le unimos los 3 sistemas de representación, sólo en esta lectura has aprendido que quizá entre las personas que trabajan contigo o en tu equipo tengas más de 12 posible personalidades diferentes que tendrás que gestionar.
¿Cómo hacer que cada uno de ellos entienda dónde quieres llegar en la empresa? ¿Cómo hacer que te entiendan? ¿Cómo potenciar a cada uno para que saquen lo mejor de ellos?
El proceso requiere entrenamiento, por lo que te aconsejo algún libro o curso de Programación neurolingüística o de cualquier otra disciplina que explique diferentes comportamientos y formas de mejorar la comunicación. Además, otra opción siempre válida es que te acerques a un Coach o incluso que lo incluyas en tu empresa…
Como dice Anthony Robbins, uno de los más famosos Coach americanos «el éxito de tu comunicación es la respuesta que obtienes», así que ya no vale «se lo he dicho y no entiendo por qué no lo ha hecho».
¡Ya lo sabes somos diferentes!
Qué tengas una productiva semana
Paloma
Paloma es Mind Coach y especialista en procesos de mejora a partir de técnicas de Programación Neurolingüística. Trabaja en el mundo de la empresa, con clientes individuales y con deportistas ayudándoles a creer más en su potencial y a llegar ahí donde quieren.